Dos magistradas progresistas discrepan sobre el aval constitucional a la Ley Trans
El presidente del TC, Cándido Conde-Pumpido, abre un periodo de debate después de evidenciarse las discrepancias de María Luisa Balaguer e Inmaculada Montalbán respecto a la ponencia del exministro Juan Carlos Campo a favor de avalar la norma.
El recurso de inconstitucionalidad que presentó el PP sobre la Ley Trans, una de las normas más polémicas impulsadas durante el anterior Gobierno de coalición, se centra, entre otros, en el artículo 19.2, que permite la modificación genital en menores de entre 12 y 16 años cuando lo pida el propio menor y «siempre que, por su edad y madurez, pueda consentir de manera informada».
También se fijan los del PP en varios apartados del artículo 44, que indica que se podrá pedir el cambio del sexo en el Registro Civil sin presentar informe médico o psicológico y sin «la previa modificación de la apariencia o función corporal de la persona a través de procedimientos médicos, quirúrgicos o de otra índole».
La ponencia del exministro de Justicia propone avalar constitucionalmente el corazón de la ley, salvo en lo referente a la redacción de dos infracciones disciplinarias, relativas a los libros de texto que presenten al colectivo como inferior y respecto a la incitación a la comisión de infracciones contra la ley.
Campo enmienda la ley en el sentido de prohibir toda práctica de modificación genital en personas intersexuales menores de doce años que «sea innecesaria desde el punto de vista médico, permitiendo tan sólo aquellas prácticas que sean necesarias, a criterio médico, para preservar la salud de la persona y siempre que la intervención sea proporcionada a la necesidad terapéutica que atiende», consta en el borrador de sentencia.
Reticencias
Las magistradas progresistas María Luisa Balaguer e Inmaculada Montalbán, vicepresidenta del TC, se muestran reticentes en cuanto a votar a favor de la ponencia de Campo, según trasladan a este diario fuentes del Constitucional, que añaden que incluso alguna otra magistrada del bloque progresista ha mostrado dudas sobre un posible voto positivo.
Así, el presidente del TC, Cándido Conde-Pumpido, ha aplazado la votación este martes del borrador sobre la Ley Trans para intentar lograr consensos entre los progresistas, ya que sin la mayoría del bloque no saldrá adelante el aval constitucional, ya que el sector conservador votará previsiblemente en contra.
Dichas fuentes indican que igual que la tramitación de la Ley Trans dividió el feminismo, su debate en el Tribunal Constitucional ha roto el tradicional consenso entre los progresistas. El principal escollo es la autodeterminación de género. La ponencia de Campo enmarca este derecho reconocido en la Ley Trans en el derecho a la integridad física, avalado por el propio tribunal de garantías.
El PP alertó de que la rectificación registral del sexo podría permitir a cualquier hombre, «aunque no presente rasgo alguno de incongruencia de género ni acredite esta condición de ningún modo», acceder a medidas de discriminación positiva de manera fraudulenta.
El borrador no contempla falta de garantías en el procedimiento de rectificación registral ni ve discriminación para las mujeres.
El próximo pronunciamiento del Tribunal Constitucional llegará después de que el Tribunal Supremo británico haya sentenciado que las mujeres trans no son legalmente mujeres y que la palabra mujer se refiere únicamente al sexo biológico de nacimiento.