María Chantal Cuellar, coordinadora del Movimiento Trans Feminista Bolivia y la Casa Trans Cochabamba, indicó que la mayor vulneración de derechos humanos que recibe esta población parte desde el mismo Estado boliviano.
“A través de su instancia máxima (judicial) que es el Tribunal Constitucional Plurinacional, que es a través de una sentencia, en donde se suprime cuatro derechos en los hombres y mujeres trans en Bolivia: derecho al matrimonio, adopción, confidencialidad y a la paridad y alternancia, es decir, un hombre una mujer trans en Bolivia no puede ser autoridad elegida en un proceso electoral”, precisa.
En 2022 la Defensoría del Pueblo, después de realizar un Informe Defensorial, denominado: “Ausencia de Garantías Estatales para el Ejercicio del Derecho de la Identidad de Género en Bolivia. Un Análisis sobre el cumplimiento de la Ley Nº 807 de Identidad de Género”, concluyó que el Estado tiene un trato discriminatorio y diferenciado hacia las personas transgénero y transexuales que enfrentan obstáculos por su identidad de género y por ende no ejercen libremente sus derechos como el resto de la población boliviana.
OPINIÓN intentó comunicarse con algunas autoridades de la comisión de derechos humanos de la Brigada Parlamentaria de Cochabamba para indagar sobre las propuestas o acciones en las que se trabaja y así erradicar este tipo de vulneraciones. Sin embargo, no obtuvo respuesta.
“NO ESTÁ EN AGENDA”
La diputada Toribia Lero (CC), indicó que no ve que el Estado trabaje en un tema para reforzar y avanzar en derechos que tiene esta población (trans).
Dijo que creencias, cultura, cosmovisión cargan, a veces, los perjuicios en la sociedad con respecto a este tipo de temas y el Estado tiene que regularlo. Además, siguió Lero, corresponde a las autoridades realizar “un trabajo integral en el marco de derechos humanos, en el marco de oportunidades, en el marco de la discriminación, que no termine en aprobar una ley que no se pueda implementar y se quede durmiendo”.
Sostuvo que desde la Cámara de Diputados se puede realizar una fiscalización a diferentes instituciones, entre ellas la Policía, para combatir violencias como las padecidas por la población trans. Sin embargo, no está en agenda parlamentaria.
‘FAMILIA SEGURA’ APOYA Y ASESORA A MUJERES TRANS
UNICEF, en coordinación interinstitucional con Casa Trans, brinda el apoyo de atención psicológica y a la salud mental de mujeres transexuales a través del programa Familia Segura.
Según el oficial de programas en Bolivia de UNICEF, Pedro López, integrantes de la Casa Trans le manifestaron que uno de los principales problemas que sufren es la atención psicológica, puesto que “no hay profesionales que sean sensibles a la naturaleza de sus vivencias”.
Por ello es que profesionales de salud han sido capacitados para poder tratar casos específicos de la Casa Trans.
Además de dar atención psicológica (ya sea puntual o permanente, con identificación o en anonimato), la línea 800-11-3040 y 777-97-667 (WhatsApp) también es de denuncia y asesoría.
“Una persona que es víctima de violencia, puede comunicarse. En estos casos, si es un hecho de violencia que está denunciando se comunica con las instancias pertinentes del Estado para que tomen acción o también se da la asesoría necesaria”, manifestó López.
Brasil: En una decisión histórica, el Tribunal Supremo penaliza la homofobia y la transfobia con prisión
En una decisión histórica, el Tribunal Supremo de Brasil dictaminó este martes que los insultos homófobos se castigarán a partir de ahora con penas de prisión. En un fallo casi unánime de 9 a 1, los insultos homotransfóbicos fueron puestos al mismo nivel legal que el discurso de odio racista. El juez Edson Fachin, que emitió el veredicto, declaró que la sentencia era un “imperativo constitucional” para dar a los ciudadanos LGBTQI+ del país la misma protección ante la ley.
La decisión fue recibida con júbilo por la comunidad LGBTQI+ brasilera, que ha estado luchando contra la violencia rampante contra ellos en el país. Si bien recordamos, en el año 2019, el Tribunal Supremo brasileño convirtió la homofobia y la transfobia en delitos similares al racismo. El racismo se tipificó como delito en Brasil en 1989, con penas de prisión de hasta cinco años. Sin embargo, la sentencia de 2019 se aplicaba a la incitación al odio contra toda la comunidad, no contra individuos concretos. La sentencia del martes corrige esto y ahora cualquier discurso de odio será castigado con penas de prisión de dos a cinco años.
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La máxima corte, de esta manera, respondió a un pedido de la Asociación Brasileña de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Travestis, Transexuales e Intersexos (ABGLT) que pedía considerar las ofensas contra la comunidad LGBTQI+ como injuria racial, tipificada como racismo. Ahora, quienes ofendan la honra de una persona por su género u orientación sexual serán procesados de igual forma a quienes discriminan por raza, color, etnia, religión u origen.
El Tribunal Supremo corrige así una interpretación que retiraba parte de la aplicabilidad de la ley sobre injuria racial sancionada en enero de 2023 por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva en una de sus primeras acciones desde que asumió su tercer mandato.
Los expertos sostienen que estas normas tan estrictas son necesarias, especialmente en un país como Brasil, donde la transfobia y la homofobia están muy extendidas. Según el grupo de defensa de los derechos Transgender Europe, 228 personas pertenecientes a la comunidad LGBTQI+ fueron asesinadas en 2022. En total, 1.741 miembros de la comunidad han sido asesinados entre 2008 y 2022.
Mar Cambrollé: «No puedo desconectar mientras nuestras vidas dependan de la cisnorma»
La activista por los derechos LGTBI reconoce que no desconecta nunca del todo pero en sus vacaciones se decanta por las playas de Peñíscola y los paisajes de Galicia, Asturias o Euskadi.
Personalidades de la política cuentan a infoLibre sus trucos para desconectar en vacaciones y sus lugares favoritos para quedarse sin cobertura
Hay actividades y trabajos que requieren una dedicación plena, por lo que desconectar al 100% en vacaciones es una tarea de lo más complicada. Este es el caso de Mar Cambrollé, activista por los derechos trans y presidenta de la Federación Plataforma Trans que ha participado en movimientos por la libertad del colectivo desde los años de la dictadura. Y es que incluso durante su tiempo de descanso, Cambrollé no duda cuando tiene que pronunciarse ante noticias que requieren una respuesta inmediata, como por ejemplo las agresiones tránsfobas.
La activista explica a infoLibre que es una “responsabilidadque se asume” y matiza que ya solo romper con la monotonía diaria es para ella un tiempo de descanso aunque siempre tenga un ojo puesto en la actualidad. Reconoce que eso conlleva que nunca haga un apagón mental pleno: «me cuesta mucho la desconexión total», confiesa Cambrollé. “No puedo quedarme inmóvil mientras nuestros cuerpos, nuestras identidades y nuestras vidas dependan de la cisnorma. Mi activismo político y social me hace estar conectada”, explica. Por eso, cree que el uso de las tecnologías tienen un lado positivo pero también uno negativo. Explica que la sociedad está tan enganchada que cada vez es más frecuente que alguien te cuente que es incapaz de salir de casa sin su móvil. “Es la época que nos ha tocado vivir”, explica.
Cuando tiene la oportunidad de viajar, en el mapa de sus preferencias aparece un destino: Peñíscola. “Me encanta estar en la playa y disfrutar del Mediterráneo”, explica la activista. Estancias que alterna con viajes al norte de España, principalmente a Galicia, Asturias y Euskadi. Cambrollé cuenta que el verdor, la naturaleza, los pueblos y los paisajes de estas zonas son magnéticos para ella. Como inseparable compañero de viaje siempre elige a su pareja: «Es todo, mi amante, mi colega de lucha… compartimos todo”.
Cambrollé actualiza sus redes sociales con fotografías de sus planes veraniegos porque le gusta compartir esos momentos con su comunidad. Es habitual ver imágenes de paseos, cenas y de los momentos en los que disfruta en la playa. Pero nunca olvida su faceta como activista y siempre emplea el altavoz que le proporcionan las redes para reivindicar la lucha por los derechos del colectivo LGTBI.
Pese a estar un poco enganchada al teléfono móvil, ya sea por su activismo o por ocio, Cambrollé también emplea parte de su tiempo libre para disfrutar de obras de teatro, música o leer, gustos que comparte con su pareja. Actualmente la activista está leyendo Verdades a la cara: recuerdo de los años salvajes, el libro escrito por Pablo Iglesias. “Espero terminarlo estas vacaciones”, concluye.
Crece la violencia y odio contra las personas trans en Europa
Por Agustina Quaranta
El informe «Monitoreo de Asesinatos Trans» del Observatorio de Personas Trans Asesinadas demostró que, entre el 1 de octubre de 2021 y el 30 de septiembre de 2022, en 44 países se reportaron 327 homicidios de personas trans.
Entre las características encontradas en sus muertes, se identificó que el 95% eran mujeres trans o personas transfemeninas. El 50% del total se dedicaba al trabajo sexual y el 36% eran migrantes.
Las trans tenemos la tasa de suicidio más alta dentro de la comunidad LGBT. Los suicidios entre la población de adolescentes y adultos trans han aumentado, los movimientos migratorios para huir de la represión de países oponentes a nuestras leyes se han intensificado. Muchas personas trans se encuentran también con que las autoridades del Estado de acogida no reconocen su identidad de género, tratándolas con un género que no es con el que se identifican. En 2020, el máximo tribunal comunitario condenó a Hungría por esta razón.
En muchos países de la UE la situación ha pasado a ser especialmente preocupante a medida que la retórica de odio, la política polarizada y los argumentos falaces se han unido en un clima de inseguridad y hostilidad.
El odio político
El delito de odio no es la única forma de discriminación que sufrimos las personas trans. Somos un blanco fácil para los políticos de derechas, ya que prevalece la incomprensión sobre cuáles son nuestras realidades.
En los 54 países en los que están presentes las organizaciones afiliadas a ILGA-Europa, uno de los principales motivos de preocupación es la situación de las personas trans que, según los informes, se enfrentan a una «enorme represión violenta» y a obstáculos jurídicos persistentes. Esto se debe a que solemos solicitar un reconocimiento legal de nuestro género sentido, que difiere del que se nos asignó al nacer.
Este proceso se debe realizar mediante la expedición de un nuevo documento, conocido como reconocimiento de género. El caso es que es distinto en toda Europa, ya que algunos Estados ofrecen la autoidentificación para facilitar el cambio, mientras que otros nos exigen un diagnóstico médico de disforia de género. En la mayoría de los países europeos, las personas transgénero no podemos obtener el reconocimiento legal sin someternos a una lista de requisitos que pueden incluir diagnóstico psiquiátrico, esterilización, cirugía genital y divorcio.
Reino Unido
Es un debate agresivo y constante lo que sucede en Reino Unido que logró bloquear el nuevo proyecto de ley de reconocimiento de género de Escocia. En países como Irlanda las lagunas en la legislación nacional hacen que el cambio de sexo legal sea imposible para las personas transgénero.
En muchos países, entre los que se encuentran Bélgica, Francia, Finlandia, Noruega y Turquía, las personas transgénero -que no deseamos someternos a operaciones quirúrgicas de esterilización y reasignación de sexo- no tenemos permitido cambiar de sexo en el certificado de nacimiento.
Alemania
En los últimos años se impone como país que acoge la comunidad LGBTI, pero aquí también para cambiar legalmente de género es necesario un diagnóstico médico. Es decir: otra persona tiene que certificar.
La violencia también se genera con la vulnerabilidad de derechos en personas Trans. “Cualquiera que sea la libertad por la que luchamos, debe ser una libertad con igualdad. La libertad es una condición que depende de la igualdad para cumplirse”.
Espacio Trans, un lugar seguro por y para personas trans
La Federación Plataforma Trans ha puesto en marcha un proyecto en Madrid y Sevilla en el que se celebrarán talleres de autoapoyo, información jurídica y cultura
Por IRENE VEGA MEDINA
Son las 14.00 de la tarde y en la Fundación 26 de diciembre, una ONG centrada en el cuidado y acompañamiento de las personas mayores del colectivo LGTBI, algunos voluntarios preparan la mesa para La Comida de las Antonias, donde quien quiera puede disfrutar de una comida por tan solo cinco euros. Mientras llegan Mar Cambrollé, presidenta de la Federación Plataforma Trans y una histórica del activismo por los derechos de las personas del colectivo LGTBI, y Alejandro Zarzuelo, responsable de comunicación de la Federación, Rubén Castro, coordinador del nuevo Espacio Trans en Madrid, atiende a una mujer que le pregunta sobre esta iniciativa. “Al final esto va a ser algo que se conozca por el boca a boca”, afirma Castro.
El pasado 10 de julio se inauguró, de manera simultánea, en Madrid y Sevilla el nuevo Espacio Trans, un lugar de encuentro para las y los disidentes de género. El proyecto tiene varias vertientes: el grupo de autoapoyo, que se celebra cada 15 días y donde compartirán las dificultades de las personas trans; pero también se usará para crear conexiones y encontrar referentes, explica Castro. Una alternativa para aquellos que no estén preparados para hablar en público de su transición y proceso, podrán requerir asistencia individualizada en la que se les asesorará y acompañará desde “el trato más cercano”, asegura el coordinador.
Otra pata importante de la iniciativa es la visibilización de la cultura trans y acercarla al público. “El viernes 20 tenemos la proyección del documental La Muerte y Vida de Marsha P. Johnson. No es lo mismo verlo en tu casa a solas que poder juntarte con un montón de gente trans. Se vive y se respira otro ambiente totalmente diferente. Me emociono solo de decirlo”, explica Castro, que también forma parte del colectivo. Después de ver el metraje habrá un debate, para analizar la situación actual y qué mejoras ha habido.
Mar Cambrollé, que lucha por los derechos de las personas trans desde el año 78, afirma que lo que se le ofrece al público es “un espacio seguro entre personas trans, atendidas por gente amble que comparte ese aspecto de su vida”. Además, asegura que los disidentes de géneros fueron “los más maltratados de la dictadura y los grandes olvidados de la democracia”.
Actualmente, juzga que la situación ha llegado a un punto de no retorno y el colectivo ha decidido tomar cartas en el asunto. “Analizando todos los estudios, los sondeos que hablan de discriminación en las personas trans, en todos los estratos sociales, pero también de todas las edades, detectamos la cruda, pero dura realidad, de que son las que mayor discriminación sufren en los centros educativos, son los que más se enfrentan a la exclusión laboral y los que mayores obstáculos legales tienen en cuanto a documentación”, cuenta Cambrollé.
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Erik García es de Zaragoza, tiene 36 años, es un hombre trans y actualmente es el apoyo de Castro en el Espacio Trans de la capital. Para él, este espacio implica “información, formación, memoria y sobre todo empoderamiento” y asegura que “si esto hubiese existido en la época de Mar [Cambrollé] hubiese supuesto un empoderamiento existencial para la comunidad”.
Castro es el más joven de los cuatro, tiene 30 años, pero tiene claro que un grupo como este hubiese sido clave para él cuando comenzó su transición. “Lo diferente que hubiera sido todo si primero hubiese encontrado referentes y no un discurso elaborado por gente totalmente ajena a nuestras realidades”, comenta el coordinador.
Además, desde su punto de vista, la lectura que se hacía era muy rígida y estaba muy pautada. “La idea era que existía una disconformidad o un malestar muy grande con tu cuerpo, por tanto, querías cambiarlo por completo”. Él siempre tuvo un deseo muy fuerte de gestar, pero creía que era algo que no podría hacer, ya que era lo que se imponía desde la sociedad. “El discurso este de nacer en un cuerpo equivocado era lo que imperaba. Entonces, por supuesto, tenías que querer adoptar todo lo que se asociaba al género con el que te identificaban. Ahora sabemos que no es así”.
Para Cambrollé, lugares como estos implican nombrar a las personas y que muchos encuentren a referentes que le hicieron falta tanto a ella, que tiene 66 años, como a Castro y a las generaciones entre medias. “En los currículos educativos nos encontramos con la ausencia de nuestras realidades en todos los estratos formativos. No aparecemos mencionados ni en la universidad, ni en la escuela, ni en los institutos. Esto es un handicap. No podemos querer un futuro de una generación que sea respetuosa con la diversidad si las personas trans no salen en ningún lado”, zanja.
Son conscientes de que la época en la que se ha inaugurado el proyecto es complicada porque la gente se va de vacaciones y tiene menos tiempo, pero también saben que es importante que este espacio exista desde ya. “La batería de bulos y de intoxicación contra las personas trans que ha habido en los últimos años ha generado grandes índices de ansiedad en el colectivo. En las redes sociales se ha vivido mucha violencia contra nosotras y tiene unas consecuencias reales en nuestra vida. Si yo, a través del internet, te puedo agredir de forma impune, también lo puedo hacer en la vida real”, afirma Cambrollé, que menciona que entre 2021 y 2022 se contabilizaron unos 231.000 tuits con carácter tránsfobo.
A la hora de inaugurar el proyecto se decidió hacer de forma simultánea entre Sevilla y Madrid porque en la capital no había federación alguna para personas trans. “Donde debería haber una diversidad en todos los espacios, no la había”, explica Erik García. Y añade que es una manera de visibilizar algo que “ha sido perseguido y ha estado estigmatizado durante años”. Que no existan espacios que nombren a las personas trans implica que “cada vez haya más personas que están en contra de la diversidad, de los derechos fundamentales y de la democracia”. “Es una respuesta directa. No vamos a permitir que ninguno de los espacios se vea abocado a un ataque tan flagrante sin plantarle cara”, sentencia García, que cuenta que en septiembre abrirán este espacio en Barcelona.
World Acquatics crea la categoría Open en plena polémica por las personas trans deportistas
La máxima institución de la natación ha anunciado la creación de esta clase “para nadadores de todos los sexos” en la próxima Copa del Mundo de Berlín.
World Aquatics, la Federación Internacional de Natación, ha anunciado este miércoles una novedad que podría revolucionar el deporte mundial en plena polémica por la entrada en competición de deportistas transexuales.
El máximo organismo de la natación ha anunciado la creación de la categoría Open en la próxima Copa del Mundo de Berlín que se celebrará del 6 al 8 de octubre. Desde la institución señalan que con este proyecto piloto World Acquatics “destaca su compromiso inquebrantable con la inclusión, dando lugar a nadadores de todos los sexos e identidades de género”. En su comunicado World Acquatics también subraya que la Copa del Mundo de Berlín incluirá en categoría Open las pruebas de 50 y 100 metros de todos los estilos y que éstas se celebrarán en una piscina olímpica de 50 metros.
Hussam Al-Musallam, presidente de World Acquatics, argumentaba de esta forma la creación de esta nueva categoría. “Cuando World Acquatics aprobó su política de elegibilidad para las categorías masculina y femenina, nos comprometimos a explorar la creación de una categoría abierta. Y fieles a nuestra palabra, un grupo de expertos ha trabajado para hacer esto realidad. Me gustaría agradecer a todos aquellos que han ayudado a World Acquatics a tener esta oportunidad”.
Esta nueva categoría abre una ventana para figuras como la estadounidense Lia Thomas, que se ha consolidado como una de las referentes trans en la natación, y que ha sido muy cuestionada tras brillar en las pruebas femeninas de los campeonatos universitarios de Estados Unidos, y que ahora prodrá demostrar ante el mundo su potencial en la nueva categoría Open.
Federación Plataforma Trans, Observatori Contra L’Homofobia de Catalunya e Ikusgune alertan de escalada LGTBI+fóbica en las últimas horas
Desde la Federación Plataforma Trans, Observatori Contra L’Homofobia de Catalunya e Ikusgune. Observatorio contra la LGTBI+fobia de Vitoria-Gasteiz queremos alertar de la escalada LGTBI+fóbica a la que estamos asistiendo en la últimas horas:
– El pasado sábado 3 activistas fueron agredidos físicamente a la salida de una fiesta organizada por el Espai LGTBI de Girona, los hechos hicieron necesaria la asistencia sanitaria.
– Esa misma noche, la puerta de un bar de ambiente gay de Sevilla fue incendiado con clientes en su interior.
-Ataque al punto lila y Arcoirísen las fiestas de Pinto el pasado lunes 15 de agosto.
Queremos subrayar la gravedad de ambas incidencias, por un lado porque se trata contra activistas LGTBI+ en una fiesta organizada por este movimiento, y en segundo lugar porque incendiar la puerta de un local cuando esta repleto de gente puede traer consecuencias muy graves. Sin ningún lugar a dudas la intencionalidad de quienes perpetraron estos ataques no es otra que sembrar el terror en las personas LGTBI+.
Los hechos que hoy denunciamos tienen su origen en la escalada de odio contra las personas LGTBI+ a la que estamos asistiendo en los últimos años, una escalada que empezó cuestionando nuestros derechos y que hoy puede traernos graves consecuencias, como las que llevaron al asesinato de Samuel Luiz hace dos años. Estas acciones responden al contexto político en el que vivimos, como son la constante deshumanización y agresión a las personas trans en las redes sociales, la estigmatización y deshumanización de las personas LGTBI+, y de su lucha, en determinados medios de comunicación. Amparándose en la libertad de expresión los discursos de odio están encontrado una vía de difusión, una practica que es la antesala a ataques como los que hemos tenido conocim iento en las últimas horas.
Desde la Federación Plataforma Trans, Observatori Contra L’Homofobia de Catalunya e Ikusgune queremos recordar que los discursos contra los derechos humanos de las personas LGTBI+, especialmente violentos contra el colectivo trans, que es quien más violencia esta teniendo que soportar, no tienen encaje en la libertad de opinión. Es por ello que exigimos que las líneas editoriales de los diferentes medios de comunicación no permitan la difusión de estos mensajes. Junto a ello, exigimos que los hechos ocurridos en los últimos días sean investigados. A llegado la hora de abordar con firmeza esta forma de violencia.
Finalmente, desde la Federación Plataforma Trans, Observatori Contra L’Homofobia de Catalunya e Ikusgune queremos mandar un fuerte abrazo a las personas agredidas así como animar a la ciudadanía a participar en cuantas movilizaciones sean organizadas por los colectivos en denuncia de estos hechos.